El
lenguaje ha sido objeto de investigación por especialistas del área durante
generaciones, es una facultad exclusiva del género humano, a través de la cual
puede el hombre expresar su ideal. Común a todos los de su especie sin
distinguir entre clase social, raza o sexo; se va adquiriendo en la medida que
el individuo se va desarrollando después de su nacimiento. Es tan importante
para la sobrevivencia de la humanidad que no existiríamos sin él, ya que es el
canal que empleamos para explicar la existencia de otras especies, según Merejo
(2007, P114). Se manifiesta por medio de la lengua evidenciándose así el
pensamiento.
Los
proyectos de desarrollo que han transformado los contextos humanos se han
iniciado con ideas que fueron expresadas por medio de lengua. Esta permite la
realización del lenguaje en una estructura lingüística definida e inseparable
de una sociedad (Merejo citando a Benveniste, 2007, p.115). No obstante, a
pesar que la humanidad posee dicha facultad -el lenguaje- para comunicarse, no
se ha podido impedir los enfrentamientos bélicos por la falta de tolerancia,
los intereses políticos, económicos entre los hombres, a quienes les motiva la
ambición de someter a otros de su misma estirpe. En este sentido, el lenguaje
común a los hombres, aunque se realice en distintas lenguas es utilizado para
oprimir, masacrar sin importar edad, sexo o raza, por ejemplo, es el caso de
personas que por diferir en credo religioso, sexual o político son asesinados,
los países que poseen el oro negro y es codiciado por otros que no poseen y
deciden camuflar sus intereses para iniciar una guerra en donde bombardean a
una población ajena de sus bajas ambiciones.
De la misma
manera, que por discrepancia se originan conflictos bélicos que arruinan
relaciones armoniosas que representen el desarrollo de naciones, donde resulten
beneficiados millones de personas, porque el lenguaje como facultad simbólica e
inherente al hombre es un canto mágico que nos ha llevado por unos encuentros y
desencuentros que se manifiestan en una profunda amistad (Merejo, 2011 P.116)
Por otro
lado, existen personalidades doctas en la expresión que deciden luchar por el
bienestar común de un sector, sin embargo, en cuanto se logra el propósito por
el cual luchaban son olvidados por la mayoría que resultaron beneficiados
producto de la lucha. Podría ser el caso de los filósofos Marx y Hegel, quienes
lucharon por reivindicaciones sociales, políticas y económicas que todavía años
después de su desaparición siguen vigentes, sin embargo, apenas son recordados
en muy pocos sectores, parece ser que con el derrumbe del socialismo soviético
y la democracia liberal la historia llegara a su fin, aunque el sujeto continuara
existiendo (Ídem, P151). ¿Será que la generación que seguía esos ideales
filosóficos ha envejecido? ¿O los intereses se han movido en la misma forma que
ha cambiado la etapa de la vida que viven?
Los ideales
filosóficos quedaron en el pasado al igual que su juventud, ahora es el tiempo
de suplir la necesidad del envejeciente y olvidar las utopías del pasado, están
viviendo probablemente el tiempo del ocaso y no hay tiempo, ni fuerza física
para enfrentar luchas. En una época donde vivimos con tantas carencias, crisis
económica y moral que terminan afectando a la sociedad en todos los niveles y nos
empujan hacia el consumismo inducido a través de medios publicitarios que
manipulan las comunidades. Esta generalmente se lleva a cabo por distintos medios,
pero en todos se emplea el lenguaje visual, oral, formas no lingüísticas, pero
a través de la cual se puede comunicar el hombre.
El lenguaje
es la fuerza que mueve al mundo, a través de él se pueden ignora las fronteras
geográficas que son como muros que impiden la socialización fraternal. Este
como capacidad simbólica permite la reafirmación del idioma, y es a partir de
su realidad el sujeto construye un discurso siguiendo un propósito en cada
situación que se le presente sostiene Merejo (2007). Sin embargo, los intereses
que se convierte en barreras opresoras del hombre imponiendo ideales con la
intención de que resulten beneficiados una franja minoritaria. Entendiendo esto
así, existen personas que deciden cultivar el intelecto para poseer el poder de
la palabra y con esta el control de masas ignorantes que no se percatan que son
sometidas, precisamente por la misma ignorancia.
Por lo
anteriormente expuesto, se confirma que el lenguaje como facultad desde el
nacimiento del hombre, es la herramienta que a través de la lengua somete a una
franja representativa de sujetos que no han logrado fortalecer las competencias
verbales requeridas para dicha actividad. De esta manera probablemente, quienes
poseen el poder económico tendrán acceso a los espacios donde se pueda
desarrollar dichas competencias verbales que dominen las masas en contextos
sociales y políticos de cualquier nación.
Por lo que, todo
individuo debe tratar en los procesos de adquisición de conocimiento
desarrollar las competencias requeridas para hacer valoraciones críticas y
poder percatarse de cuando se le quiere utilizar en beneficio propio. Asimismo,
dichas las habilidades les permitirán crear estrategias para exigir sus
derechos como ciudadano, y la lectura es una vía idónea para desarrollar en el
sujeto la capacidad para socializar con compañeros en igualdad de condiciones.
Referencia
bibliográfica
Merejo, Andrés (2007) “Conversaciones en el lago” Narraciones filosóficas. República
Dominicana. Imprenta la escalera.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
gracias, por detenerte a leer mis redacciones reflexivas esperando que tu comentario motive al debate entre mis seguidores y yo.